Sunday, March 11, 2018

LibrArte en el Congreso de Libreros: Las Librerías y la República en México




1. Introducción
Este domingo 11 de marzo, mí Padre cumpliría 86 años y quiero dedicarle estas palabras, sobre los libros y la lectura, las virtudes cardinales de la república y el papel de las librerías para la necesaria y urgente restauración del gobierno constitucional en México, que son la herencia más importante que nos legó a muchos, con su ejemplo y Autoridad.
Por la oportunidad de vivir en un mundo maravilloso, que trataré de resumir con algunos recuerdos: el primer libro que me compró, lo tomé de una mesa en la Librería más bella del mundo, la desaparecida Librería de Cristal, en la Pérgola de la Alameda Central del D.F.
Porque me acompañó al ex templo de San Pedro y San Pablo, y me enseñó a consultar los periódicos que guardaba la Hemeroteca Nacional, a donde no dejé de ir una y otra vez hasta que abandonó las calles del Carmen.
Porque formó y templó mi carácter con base en tres valores naturales en el México republicano en que nací y crecí: libertad, independencia y valentía.
Nunca olvidaré que cuando tenía escasos ocho años, mi Padre decidió castigarme porque era muy rebelde y me llevó a la imprenta de Don Luis Barrales, para que me diera trabajo durante las vacaciones.
La imprenta Esther se encontraba exactamente enfrente de nuestra casa, en las calles de la colonia Morelos y Don Luis era muy amigo de mi Padre, por lo que el trabajo se convirtió en un placer enorme, que me salvaba de las faenas domésticas que me atildaba mi Madre, mientras aprendía y escuchaba conversaciones de personas mayores y además, ganaba una raya semanal, que compartía obligadamente con el gasto familiar.
En la imprenta pasé por todos los departamentos, en la cuchilla, encuadernación, en las impresoras, el offset y primero que nada en el área de cajas, donde me dedicaba a deshacer las formas que paraba Don Tino, siempre atento a los aprendices, con un tipómetro en la mano para tundir a quienes cometían un error, de los cuales el peor de todos era sin duda, empastelar una caja.
Si por descuido o accidente se caía al piso una de ellas –supongo que la mayoría tiene una idea de lo que hablo- los miles de tipos se revolvían y componer aquel desorden era algo tan delicado y complicado, era colocar todo nuevamente en su lugar, como lo que sucede hoy en día en México, donde los significados de las palabras son la causa primera por recuperar: para eso estamos y existimos las librerías.

2. LibrArte en Tejupilco. Tres mujeres a contracorriente en una sociedad sin libros.
Debo reconocer que nuestra librería nació realmente hace cinco años, en el COLIME que se llevó a cabo en Valle de Bravo. Aprendí mucho.
Dos años después, concursamos como Emprendedores del estado de México y nuestro Proyecto de Librería, ganó el concurso. A partir de entonces se vuelve obligatorio hablar de dos establecimientos completamente diferentes: la librería primitiva –se llamaba "La Web o N@D@”- inspirada en las andanzas ancestrales en las inmediaciones del Centro Histórico de la Ciudad de México, y la Librería LibrArte que nació el mes de enero de 2016

Han sido dos años en los que LibrArte ha ganado Premios y Concursos y recibido reconocimientos que nos causan gran satisfacción: Obtuvimos al IX Premio Nacional de Librería, nos felicitó el señor gobernador (por tuiter claro) y las notas en la prensa oficial, inundaron todo el estado de México, excepto en Tejupilco. El presidente municipal primero giró órdenes de no difundir ninguna información ni “hablar” sobre el trabajo de LibrArte y después extendió ese manazo a Danzarte, la empresa dedicada al ejercicio y el arte, propiedad de mi hija mayor.
Para quien no sepa donde se localiza Tejupilco, les diré que estamos al sur del estado de México, frontera con los estados de Michoacán y Guerrero. Un total de 35 municipios que constituyen lo que se conoce como “la Tierra Caliente”.
No ha sido fácil y hemos concitado enemigos, porque nos hemos convertido en palanca de velocidades que acelera el desarrollo cultural, en una región atávica y conservadora, en favor de grupos beneficiados con el NO Leer y Escribir. 

Es el México real, el México profundo. Empero, nuestros registros indican que el ejercicio de 2017 respecto al de 2016,  a pesar de que el año pasado comenzó con negros augurios y peores presagios, completamente inesperados, el del ascenso de Trump, la devaluación del peso, los gasolinazos, las humillaciones diplomáticas frente al imperio del norte, el fin inminente del TLC y para colmo los temblores de septiembre, antecedidos por los vientos huracanados del verano,  queremos compartir que nuestro trabajo ha tenido un efecto multiplicador para LibrArte, en ánimos, ideas y resultados financieros: Al primer semestre de 2017, nuestras ventas crecieron en 50% y al 14 de febrero del presente 2018, las ventas anuales comparadas, aumentaron casi en 100%

Ello ha sido posible, gracias a la compañía de editoriales comprometidas con nuestro proyecto librero y en virtud de que se han invertido los recursos de los Premios como Emprendedores y los del FIL-Indeli, para incrementar los acervos bibliográficos, abrir una sucursal en Temascaltepec y otra en Tejupilco, acordes a las necesidades de la población.

Comenzamos con el programa comprometido: ¡Salir Afuera! a la letra del Premio Nacional de Librería 2016, reforzado con otro programa más, al que llamamos “Leer es Jugar”, para llevar la fiesta del libro y la lectura a las escuelas y plazas públicas de la región.

En el transcurso de 2017, participamos activamente en diferentes eventos para difundir la lectura y la escritura, entre la población que habitamos, la clientela que servimos y la región donde nos alojamos, y nos ha ido muy bien: La Cámara Nacional de la Industria Editorial (CANIEM) otorgó a LibrArte, una Mención Especial en el tradicional Concurso de Vitrinas, o de Exhibición de libro infantil y juvenil.

Pero el Premio Mayor ha sido sin duda, la obtención del Nacional al Fomento a la Lectura y la Escritura que organiza la Secretaría de Cultura, la misma CANIEM y la SEP, que por primera vez abrió una categoría para reconocer y entregar este importante galardón al Fomento a la Lectura, desde las librerías.
Y en este mismo año, ha sido especialmente significativo que dos grupos capitales de los libros y las librerías, han reconocido a Cristina Garcia (la Dire) como “Mejor Vendedora Creativa, en la categoría de Empresaria-Emprendedora” (Indeli); y como “Nuevos Emprendedores”, por el grupo de editoriales AMATL, que inaugura con nosotros, una nueva categoría librera.

Para llevar a cabo nuestra misión, hemos acuñado frases que se han convertido en definiciones y banderas de Librarte, por ejemplo:
-          Somos una Librería que nació hace muchos años, muy lejos del sur del estado de México…  nuestro trabajo como libreros y libreras, constituye un polo de desarrollo y fomento cultural, que abre espacios para la comunicación y conocimiento, y combate frontalmente, con el gusto por la lectura, los vicios del alcohol, las drogas y la violencia; otra.
-          Somos, una librería organizada, administrada y dirigida solo por mujeres, que demuestra todos los días que no es verdadera la afirmación repetida, de que México se encamina hacia un país sin librerías.
-          Pero de todas las definiciones mercadológicas, de política y gobierno, la que ponemos sobre la mesa en este Congreso, es que somos una especie de Librería que se ha propuesto forjar un modelo regional de librería nacional, a contracorriente con la tendencia del mercado librero en México, de oligopolios y oligopsonios, de élites en urbes sobrepobladas, de plagios y estancos en un mercado distorsionado, incapaz de acceder con el libro y la lectura a regiones como las que atendemos, que además de Tejupilco, abarca al menos media docena de municipios, e influye sin duda alguna en las dos entidades colindantes al estado de México: Guerrero y Michoacán.

3. Las Librerías: un baluarte para la restauración de la república en México.
Hay tres razones que demandan restaurar la república en México y en todas ellas, las librerías podríamos desempeñar un papel clave en este proceso de sanación política:
1.      Porque cuando triunfan las repúblicas desaparecen de la sociedad, cual si se tratase de un acto de magia, los muy ricos y los muy pobres. Es la fusión de los criterios oligárquicos y democráticos con los que se arriba a la justicia del orden político republicano, el justo medio donde reina la libertad y la virtud.
“Vale la pena recordar que una librería no es sólo un almacén de libros, sino el lugar en que libreros y libreras hacen de oficiantes, y no sólo de intermediarios, de lo mejor de lo que colectivamente somos. Y, como tales, también, de lo mejor que colectivamente podemos aspirar a ser.”(Antich)
2.      Porque la única manera de conseguir un estado justo y por tanto bien ordenado, es que los gobernantes tengan una vida superior y rica en excelencias del alma, una vida política, activa, de otra naturaleza a la vida dormida que se propala como sinónimo de felicidad en las oligarquías, de hombres famélicos de bienes externos, por padecer ayuno permanente de bienes internos.
“A mediados del siglo XX, el gabinete presidencial tenía una escolaridad promedio que apenas llegaba a la licenciatura. Sin embargo, muchos funcionarios de entonces creían en los libros, en el arte, en la cultura, como algo importantísimo para la vida personal y nacional. Algunos fueron grandes escritores. Ahora hay altos funcionarios con doctorados en el extranjero a los cuales no es fácil explicarles que la cultura sí nos importa.”(G. Zaid)
3.      Porque la constitución de una república no significa la caída de un estado justo a uno injusto, sino la elevación y mejoramiento de los estados injustos a los justos. Es la capacidad de las sociedades humanas para recobrar su salud y recuperarse. Transitar de oligarquías O democracias, a gobiernos constitucionales, siempre y cuando se logren quitar de los extremos pasionales, la riqueza y la pobreza excesivas.
Ya que se dice y se sabe que las Librerías, más que vender libros, somos Centros Culturales: recintos para el encuentro entre autores y lectores, oráculos donde encontrar resoluciones a las dudas de cada uno y de todos, ventanas para asomarse a lo desconocido, puertas para abrir, espacios infantiles, diálogos con la historia, arcanos de poder, valladares contra el oscurantismo, barreras infranqueables, la última línea contra el despotismo de los gobernantes. 

Son tres premisas, suficientes y necesarias para urgir que las pequeñas librerías, las de barrio, las independientes, las grandes cadenas o las librerías públicas, antepongan sobre el principio empresarial del comercio de libros (las ganancias), la autoridad del Fomento a la Lectura y la creación de Lectores: garantes del acceso de la lectura activa a los hombres y mujeres libres, a las mayorías sociales, a las clases medias ilustradas, investidas de la necesaria valentía ciudadana y la virtud de la justicia social.
Que en las librerías brille con orgullo el oficio del librero, “el mío es el oficio más arriesgado del mundo… soy responsable de la difusión del pensamiento, incluso del más incómodo”.

Porque por desgracia, en nuestro país suceden cosas más graves, que un asunto de oferta y demanda. En México, se ha roto, desfondado, la moral y la política. Vivimos en un estado de bancarrota pública, más grave que la financiera. Estado de pérdida nacional, que se caracteriza por la impunidad imperante en la sociedad.
Ruptura de la fusión entre riqueza y libertad, que en vez de una riqueza común o compartida, los cada vez más pocos ricos en exceso se han vuelto más ricos y los muchos demasiado pobres, cada vez más numerosos, se hacen más pobres, con excepción de sus líderes, desde el de PEMEX a los que sigue escandalosamente el magisterio oficial, por la contradicción absoluta que existe entre su misión y la corrupción en la que se encuentra.
Roto el pacto republicano, los ricos apoderados de los privilegios fiscales, los pobres sindicalizados, apoderados de las empresas paraestatales y las entidades públicas como las universidades y las escuelas de los ciclos primario y secundario…  la burocracia partidista y pública, apoderada de los puestos públicos y los recursos públicos.
Tal desmembramiento causa la ruptura y desarticulación de las clases sociales y el pacto social todo. Panorama que se ofrece agravado por la guerra librada entre los diferentes cárteles del crimen organizado público y privado, oficial e internacional, lo más antirrepublicano que puede haber en una república, que se ha dejado someter por nuestro vecino, el narcoestado estadounidense, sin límites con la legalización de la droga.

Eso y más son las cumbres que tenemos por conquistar, las escasas librerías que hay en México, que además, debemos resolver un problema mayor: la definición misma de la naturaleza y papel de la librería.

4. Propuesta: Revisé el marco jurídico-administrativo vigente de Cámaras y Asociaciones en relación a las Librerías.
El primer paso que hay que dar, para que las librerías se conviertan en las cabezas de playa fundamentales en el proceso de recomposición del estado mexicano, es contar con representación pública y tener voz y voto y no como ahora, que parece que en el mejor estilo de Salinas de Gortari, a las librerías en México, “ni las ven ni las oyen”

Proponemos analizar dos alternativas: revisar el caso de la CANACINTRA que se constituye a instancias del Presidente Manuel Ávila Camacho, por la necesidad de unidad nacional y para garantizar la producción de bienes de consumo, ante la flagrancia de la Segunda Guerra Mundial.
Ese sería el escenario al que se podría acudir para reunirnos en una cámara, librerías, asociaciones, e institutos encargados de las librerías y del fomento a la lectura, para enfrentar y terminar con una guerra comercial no declarada, que se ha convertido en la Segunda Guerra Civil en México.

La segunda alternativa sería que le Cámara Nacional de la Industria Editorial, extendiera sus miras hacia la parte de la industria editorial que trata el comercio de libros, y las librerías: Porrua, Trillas podrían ser embajadores de esta ruta de salvación, porque suman ambas actividades.
Es una ocurrencia, “y de las ocurrencias nacen grandes ideas” Y si no, que se cambié la ley…  Porque “en medio de la precariedad generalizada y el desánimo al que tantas cosas nos invitan, las librerías somos una embajada de futuro”.
La pasión con la que se opinó y defendieron -en la inauguración del Congreso de LIbreros- los formidables textos de la editorial Trillas, la casa que siempre ha acompañado a LibrArte,  me hizo recordar otro episodio con mi Jefe, cuando comenzaban con la palabrita que se ha convertido de una idea-ideología, a una religión, se trataba de elegir qué programa de TV debíamos ver en familia y apelábamos a la democracia como solución: Mi Madre, como todas las mamás –en la historia de la humanidad- siempre votaba igual que hijos e hijas y al contar le decíamos "ganamos" y mi Padre decía no; "pero Papá somos 5 votos contra uno". No, aclaraba con Majestad, porque mi voto vale “6”: la Ley es la palabra del Padre.



EL FANTASMA DEL LIBERALISMO

  EL FANTASMA DEL LIBERALISMO Saludo con gusto al público lector de “El Liberal Mexicano”, al que invito al debate en torno a la naturalez...