Monday, January 19, 2009

LA FAMILIA Y EL ESTADO MEXICANO

Al comenzar el 2009, la familia se ha convertido en el tema del momento en México, lamentablemente de la peor manera posible. Porque tanto el clero católico, como los vividores de la política demagógica, pelean por la manipulación y control de la familia, cual si fuera un botín en subasta. Porque la familia es el tema central y la base de toda sociedad, de cualquier Estado político, que se propone la felicidad de la comunidad de sus ciudadanos
Porque no hay asociación política sin la existencia primera de la familia. Porque la familia es una forma natural de asociación. Porque la humanidad no podría existir y organizarse y mas que sobrevivir, vivir plenamente conforme a los ordenamientos naturales de la vida.
Las familias existen antes que los Estados o las naciones, los países o los gobiernos. La familia es la base, sustento, cimiento y necesidad de cualquier asociación humana. Separadas de la familia los hombres o mujeres, o son bestias o son dioses.
Y por eso suele confundirse el origen de la familia. Por intereses creados, por ambiciones y por las pasiones bajas, del vientre inferior, las que convierten a la familia en un medio para las artes de la crematística, las obligaciones de la comercialización, las necesidades mercantiles y las tragedias políticas convertidas en símbolos de la modernidad, en paradigmas de la fe, agresiones diarias.
Padre-Madre-Hijos y bienes animados e inanimados, es la esencia de la familia. El que educa el alma, la que cuida el cuerpo, quienes aún no cuentan con la virtud, por aquellos que hacen uso de su cuerpo, los unos que ven y obedecen a la razón, otros que ni la ven ni la entienden, aparte de la riqueza material, emocional e intelectual.
Y es menester que la costumbre y los principios, la esencia misma de la deliberación y de la elección, el entendimiento y el carácter para atemperar las pasiones y para distinguir, entre la amplia banda de los extremos opuestos, distinguir entre lo bueno y lo malo, lo bello y lo desagradable, lo mejor y lo peor. Esa y solo esa es la naturaleza de la autoridad, el origen de la familia misma.
Por su importancia, esencia, fuerza, origen, necesidad, la familia es objeto de arrebatos. La iglesia católica se asume como depositaria de la familia perfecta. La sociedad contemporánea exige el reconocimiento a asociaciones alejadas de la familia natural. Nada más alejada de la realidad, nada más cercano a la peor amenaza nacional.
Porque dejar la educación de los hijos en el monstruo, mediocre e ignorante, apático, corrupto y sumiso del magisterio nacional, es como quitar a los propios la vida misma. Permitir que la televisión nacional se encargue de consumar el atentado homicida, es la condena actual. Pero abdicar ante la educación confesional, además de renuncia, es fraticidio.
Años de conspirar abiertamente en contra de la primera magistratura, de la principal autoridad política ha derivado en familias desintegradas, sin respeto, sin amistad; a divorcios exprés, a las familias mochas, rotas, hipócritas y temerosas.

Monday, January 12, 2009

SE DERRUMBA LA ECONOMÍA ESPECULATIVA

Comienza un nuevo año. Por fin terminó el nefasto 2008, el año de las olimpiadas que catapultaron, ante los ojos del mundo entero, a la China milenaria. Gigante asiático en todos los sentidos: más de 9 millones de kilómetros cuadrados de superficie, el cuarto mayor del planeta; una riqueza nacional diez veces mayor a la de nuestro país, y una población arriba de los 1300 millones de habitantes, el país mas poblado del mundo y que se gobierna bajo una forma de República Socialista. Mercado enorme de producción y consumo.
El 2008 pasará a la historia, como un parteaguas en la historia mundial y en la de México, sin duda. Derrumbe estrepitoso, del sistema económico, criminal y fantasioso, que duro 25 años. Porque las economías basadas en las finanzas y los flujos monetarios, promovido por Ronald Reagan y bendecidos por Juan Pablo II se convirtió en el acabose, castillo de naipes para las fortunas construidas sobre la especulación, la fuerza de las armas, engaño y mentiras. En la fe occidental que no es la mexicana, más orientales por fortuna, todavía.
Mientras todos reclaman ayuda, los bancos, las automotrices, las inmobiliarias, el desempleo se propaga diariamente como pandemia sin remedio. La hegemonía mundial de los Estrados Unidos, siempre cuestionada, cada vez mayormente despreciada y devaluada, pierde frente al euro la primacía que solo la guerromanía imperial ha sostenido de manera artificial. Hasta el emporio de Hugh Heffner, el magnate de la ciudad peluche de la pornografía, exige subsidios, a fin de sostener la industria del sexo y la depravación que, argumenta el epicúreo, es más necesaria que nunca, hoy que se pierde la fe en lo que la modernidad ha idolatrado: el robo, el incesto y el parricidio. Los valores de la fe dominante, repetida, terca y familiar.
Como sucede en México, repleto de símbolos cristianos, de sambenitos y oraciones en la sede misma de los poderes federales, aquellos que se constituyeron sobre la máxima de un Estado laico, obligado, indispensable para existir, para ser y poder, para llegar a vivir. Porque la iglesia como institución, la católica siempre ha sido siniestra y perversa.
Y volver a escuchar nuevamente las diatribas paranoicas, de supuestos complots mundiales y amenazas lo mismo da, de la masonería, o de los ovnis o de Chico Che. Absurdos que nos desgajaron como nación, enfrentaron a hermanos mexicanos y desmembraron nuestro territorio.
El año que terminó es resumen de la incapacidad y de la inutilidad de la vía electoral como forma de buen gobierno. El 2008 es síntesis de la mentira y la demagogia desde el poder y por el poder. Bisagra final de un gobierno mínimo, sin autoridad, sin estrategia ni dirección. Gobierno en guerra sin entender a esta como instrumento de la política, por otros medios, reglamentada por la sangre y el fuego. Si Adolfo Hitler, con el ejército mas poderoso de su tiempo fue incapaz de ganar una guerra sin estrategia alguna, menos Calderón podrá imponer su voluntad sobre un enemigo que ha hecho del tráfico de drogas un fin claro, conciso y contundente.
No es con el combate a los barones del narcotráfico como se van a resolver los problemas de México. Es una guerra perdida y seguirán las bajas no solo de las heroicas fuerzas de la seguridad y el orden, sino se caerán más aviones, se atentará contra objetivos más sensibles. Y no servirán de nada los bustos develados, por los virreyes de la lambisconería y la vergüenza, mayormente al pertenecer a un partido que se supone en la oposición, al desgobierno de la reacción y la vergüenza. El gobernador de Chiapas es una verguenza nacional.
Porque la única oposición real, al estado de las cosas, es la que defiende López Obrador, mientras los demás velan armas y artimañas, al acecho del ansiado poder que se vislumbra nuevamente cercano a la mafia desplazada, que construye escenarios, retrata candidatos y alista el abordaje.

EL FANTASMA DEL LIBERALISMO

  EL FANTASMA DEL LIBERALISMO Saludo con gusto al público lector de “El Liberal Mexicano”, al que invito al debate en torno a la naturalez...