El director del DIF manejando una camioneta con altavoces, vuelta y vuelta a la plaza de esta pequeña y olvidada localidad, contaminando la tradicional pachorra, el ambiente aburrido, el silencio que no rompe el viento, con el disco rayado repitiendo las bondades de Enrique Peña Nieto, hombre de carton piedra, monigote a modo, as bajo la manga, invento que responde a las necesidades y necedades para los que fué creado: candidato del PRI al gobierno del Estado de México.
Los accesos de Temascaltepec bloqueados, las policias por única vez en el año activas y altaneras; las secretarias del municipio, el personal del registró público, las del civil, la Notaria, el de la estación de gasolina, los sacerdotes de la iglesia. Todos los que siempre, los que todos los días hacen de su existencia insulto a la alegria de vivir: los choferes, los basureros, los fontaneros. Las célebres fuerza vivas retratadas por Eduardo del Rio, Rius: Doña Eme, Gedeón, el Lechuzo, Artemio, Ticiano y por supuesto Don Perpetuo. Los pobres privilegiados de siempre. La escoria, lo peor de México, repetido otra vez, en el microcosmos de Temascaltepec.
La "marea roja" es el nombre que antes se llamo "raton loco", "operación tamal". Que miras hasta el fastidio, el hartazgo de Quique, el del copetito a la Cesar Costa. Quique, el "sobrino" de una mafia que ha hecho un arte, de la insensibilidad intocable a cualquier crítica, análisis, noticia. Quique, auténtico producto de la mercadotécnia política. Quique, abuso, soberbia, desprecio por la ciudadania nacional, no solo del estado; Quique garantía, firmada o cheque en blanco de la corrupción, el engaño, avaricias y codicias sin medida. Peña Nieto, certeza futura de la máxima de Lichtemberg "el poder corrompe y el poder absoluto, corrompe absolutamente"
El acoso empleado para con-vencer a la ciudadania de las maravillas que encierra este candidato, este candidote, el candadote con que se atenazan los grilletes que condenan a la permanente esclavitud. Se le mira en cada poste, colgados sus pendones. Ondean los estandartes, pegados en las puertas de las casas, pintado en paredes; lo escuchas en la radio de ocho estados vecinos al de México; no falta en la televisión nacional ni en los partidos de futbol. tampoco en las tarjetas telefónicas, en gorras y vasos, en los recibos de las casetas de peaje; te lo encuentras en mandiles, bolsas y aún en el papel higienico, en los rollos para estar en la intimidad del baño con Quique, el guapo.
Ese es el ambiente que priva en Temascaltepec. Si la candidata del PRD, la primera en visitar este pueblo, paso desapercibida, porque las familias perredistas en el pueblo no supieron ni que hacer, menos decir. Si el candidato del PAN logró que salieran del "closet" muchos mochos que de día pasan por "institucionales". Ahora la presencia de Peña Nieto y las promesas que le acompañan: Galilea Montijo, Ana Barbara y ¡guau! RBD. Basura de la taravisión, en apoyo del candidato desechable.
La presencia de Enrique Peña Nieto es un insulto al electorado mexiquense. Tercera, cuarta generación, heredero de la auténtica mafia del poder en México. Recordar a Hank Gonzalez, "el maestro"; el de la máxima de "un político pobre es un pobre político", el único, verdadero y auténtico destructor de la Ciudad de México, el que siempre recomendó "haz lo que te convenga", el de los ejes viales, el de ni un centímetro al metro, el de los intereses coludidos con las automotoras para su exclusivo interés. Hank Gonzalez el del trato de dama, el que te "la dejaba ir suavecito".
Los accesos de Temascaltepec bloqueados, las policias por única vez en el año activas y altaneras; las secretarias del municipio, el personal del registró público, las del civil, la Notaria, el de la estación de gasolina, los sacerdotes de la iglesia. Todos los que siempre, los que todos los días hacen de su existencia insulto a la alegria de vivir: los choferes, los basureros, los fontaneros. Las célebres fuerza vivas retratadas por Eduardo del Rio, Rius: Doña Eme, Gedeón, el Lechuzo, Artemio, Ticiano y por supuesto Don Perpetuo. Los pobres privilegiados de siempre. La escoria, lo peor de México, repetido otra vez, en el microcosmos de Temascaltepec.
La "marea roja" es el nombre que antes se llamo "raton loco", "operación tamal". Que miras hasta el fastidio, el hartazgo de Quique, el del copetito a la Cesar Costa. Quique, el "sobrino" de una mafia que ha hecho un arte, de la insensibilidad intocable a cualquier crítica, análisis, noticia. Quique, auténtico producto de la mercadotécnia política. Quique, abuso, soberbia, desprecio por la ciudadania nacional, no solo del estado; Quique garantía, firmada o cheque en blanco de la corrupción, el engaño, avaricias y codicias sin medida. Peña Nieto, certeza futura de la máxima de Lichtemberg "el poder corrompe y el poder absoluto, corrompe absolutamente"
El acoso empleado para con-vencer a la ciudadania de las maravillas que encierra este candidato, este candidote, el candadote con que se atenazan los grilletes que condenan a la permanente esclavitud. Se le mira en cada poste, colgados sus pendones. Ondean los estandartes, pegados en las puertas de las casas, pintado en paredes; lo escuchas en la radio de ocho estados vecinos al de México; no falta en la televisión nacional ni en los partidos de futbol. tampoco en las tarjetas telefónicas, en gorras y vasos, en los recibos de las casetas de peaje; te lo encuentras en mandiles, bolsas y aún en el papel higienico, en los rollos para estar en la intimidad del baño con Quique, el guapo.
Ese es el ambiente que priva en Temascaltepec. Si la candidata del PRD, la primera en visitar este pueblo, paso desapercibida, porque las familias perredistas en el pueblo no supieron ni que hacer, menos decir. Si el candidato del PAN logró que salieran del "closet" muchos mochos que de día pasan por "institucionales". Ahora la presencia de Peña Nieto y las promesas que le acompañan: Galilea Montijo, Ana Barbara y ¡guau! RBD. Basura de la taravisión, en apoyo del candidato desechable.
La presencia de Enrique Peña Nieto es un insulto al electorado mexiquense. Tercera, cuarta generación, heredero de la auténtica mafia del poder en México. Recordar a Hank Gonzalez, "el maestro"; el de la máxima de "un político pobre es un pobre político", el único, verdadero y auténtico destructor de la Ciudad de México, el que siempre recomendó "haz lo que te convenga", el de los ejes viales, el de ni un centímetro al metro, el de los intereses coludidos con las automotoras para su exclusivo interés. Hank Gonzalez el del trato de dama, el que te "la dejaba ir suavecito".
Peña Nieto, heredero de los Pichardo Pagaza, de los Mario Ramón Beteta. Peña Nieto, el "sobrino" del tio, el Gobernador saliente. Peña Nieto, entrenado en la escuela de los Oscar Espinoza Villareal, el último de los "mexiquenses" que toleramos los chilangos del Distrito Federal, quien perdió para el PRI el gobierno de la Capital de la República ante Cuauhtemoc Cardenas y el PRD.
Si la prensa norteamericana identificó a Hank con Vito Corleone, y a Carlos Salinas de Gortari con el nuevo "Padrino", Il capo di ttuti los capos, Espinoza Villarreal no llegaría ni a un Bruno Tataglia y Arturo Montiel apenas y le queda encarnar al Pentangelli mexicano. ¿Peña Nieto el Vincent Minelli, el sobrino, amante de la hija?
Temascaltepec hoy padece el ejercicio del poder de mafias vaqueras, mafias talamontes, mafias mariguaneras. Rancheros enloquecidos por el poder, el dinero, la traición, la ambición sin escrúpulos. Sin presente, negro futuro.