“López Obrador esta
cabrón”
Cuartel de estrategia
electoral del PRI
No son asuntos míos las
cuestiones de la teología y no me refiero a ninguna deidad particular. Me
siento extraño al invocar este titulo y aclaro que hablo de la única divinidad
en la que creo -auque al final de esta Carta explico un poco más- la que
realmente constituye al ser humano soberano. Es la parte divina del alma
humana, más allá del alma desiderativa, aun por encima de la parte inteligente
y razonadora, y de aquella parte del alma humana, que gobierna las cuestiones orgánicas
naturales. La divinidad del ser humano es el único y verdadero motor en el que
se puede creer, para esperar que por fin nosotros, México, asumamos un rumbo
propio, libre y autónomo.
Hay señales que se observan en
todas partes, para encender la llama de la esperanza doble. Son augurios
divinos que presagian la victoria del gobierno para todos, que encabezara Andrés
Manuel López Obrador, y la derrota que
evite la restauración de la dictadura del PRI, en la persona de Enrique Peña
Nieto. Es la lucha entre el bien y el mal, es la hora de ser testigos de la
verdad, del triunfo de la divinidad sobre el bestialismo. Somos afortunados por
vivir en el futuro anticipado hace más de mil años por los mayas galácticos.
Nos toca hacer nuestra parte. Aquí somos y aquí estamos.
Porque es lamentable que el PRI extravíe
todo recuerdo de justicia, honor y valor, para empeñarse en gobernar con base
en el voto “duro”, el del personal a su servicio, el de la población mas
marginal, el de la gente a quienes, la vejez, los usos y costumbres ya no le dan
espacios de reflexión. Porque es criminal corromper deliberadamente, a gente
joven y a familias miserables, con todo tipo de tretas y asechanzas: compra de
votos, mentiras televisadas, reparto de basura proselitista, obsequios a cambio
de voluntades políticas. Pero donde la coacción electorera ofende mas, es cuando las enfermeras o el magisterio, se prestan, bajo amenazas, sin
voluntad alguna, a ejecutar a pacientes, alumnos, familias, a reproducir el
miedo, perder los tortibonos, las despensas, las ayudas, las medicinas, a
quitar credenciales de elector o exigir folios
Aunque tengo amigos en el PRI, no
cabe duda que esta vez se han colocado a la vera del lado bestial de la
sociedad mexicana. Sin azoro alguno, la juventudes PRIistas las constituyen, en
su mayoría, con lo mas nauseabundo de las comunidades, en el estilo de Paulina
Peña, la hija que nos califico a los mexicanos de “proles y pencas…” Es el PRI
sometido a poderes invisibles, cuya mascara conocida es la de Carlos Salinas de
Gortari. Es el PRI asociado a TELEVISA, que a todo momento ofende y manipula.
Es el PRI que se exhibe en la imagen del poder que define Michel Foucault, como
“pobre en recursos, parco en sus métodos, monótono en las tácticas que utiliza,
incapaz de invención y como condenado a repetirse siempre a si mismo” Un PRI
que no alcanza a entender que en el DF,
la izquierda política nacional, va a ganar con el 75% de los votos,
porque la gente esta informada y que Peña va a perder, porque la gente esta
harta.
La elección del próximo domingo 1
de julio es una lucha entre la inteligencia y la estupidez, entre la libertad y
la servidumbre voluntaria. Es la eterna batalla entre el bien y el mal, lo
repito nuevamente. Un poder benéfico que se manifiesta libremente por las
calles, con enjundia y alegría; contra un mal que asecha en la oscuridad, se
asoma a escondidas por doquier, induciendo, ocultando toda clase de practicas
ciudadanas vergonzantes: es el relleno de urnas, invalidación de votos, carruseles
electorales, compra de credenciales, pago de fotografías al interior de las
casillas, amenazas y despidos injustificados, son las promesas, las entregas de
material, es dinero vulgar, son delitos, son trompadas a la ciudadanía, es
impunidad ante las instituciones políticas, que viven en un mundo “color de rosa”,
arrellanados en oficinas urbanas, ajenos a la realidad grotesca y a los medios
ilegales que se utilizan para conquistar el poder, de manera fraudulenta.
Es la hora de la victoria social
y nacionalista y no podemos dejar pasar este momento. Nuestras vidas dependen
de este 1 de julio de 2012. No hay futuro propio, en caso de que la ciudadanía
mexicana resulte vencida, por el poder corruptor del dinero, por el poder
manipulador de la mentira, por el poder instintivo del bajo vientre humano,
Este 1 de julio, nos toca en suerte a mí, a ti, amigo,
ciudadano, vecino, mexicano, a todos, la responsabilidad de decidir nuestro
destino y nuestro futuro. Porque la restauración del PRI, se erige desafiante
en la amenaza de la eterna dictadura, en la reconstrucción absurda y estúpida
de nuestro “Muro de Berlín”. Nunca como ahora había estado en nuestras manos
ser, como Amado Nervo decía, los “arquitectos de nuestro propio destino”. Nunca
como ahora se aplica a la ciudadanía que saldrá a votar, la frase de W.
Churchill: “Nunca tantos, le debieron tanto a tan pocos”
La juventud se ha levantado para
evitarlo. Toda la comunidad intelectual, artística, científica, académica se ha
expresado abiertamente a favor de Andrés Manuel López Obrador y en contra de
Peña Nieto: Demian Alcazar, Carlos Fuentes (q.e.p.d.) Carlos Bracho, el músico Benjamin
Anaya, el Doctor Gerardo Ceballos, Demian Bichir, José Luis Cuevas, Isaac
Broad, Arquitecto, Guillermo Arriaga, bailarín y corógrafo, toda la comunidad
cinematográfica, Carlos Reygadas, Gael Garcia, Vanessa Bauche, Pablo Latapi… la
lista es enorme
Porque el gabinete de Andrés
Manuel incluye a gente del talento de Juan Ramón de la Fuente, Jiménez Espriú,
Rene Druker, Ortiz Pinchetti, el Maquio Jr. Clouthier, Don Bernardo Batiz,
Marcelo Ebrard, Mondragón y Kalb. Un gobierno integrado por los mejores
ciudadanos y no una burocracia de compromisos como la que le impondrían a Peña
Nieto, con la Gordillo,
los Moreira, los Golden Boys de Tolucolandia. Un gobierno Republicano y
Democrático con destino manifiesto, en vez de una Satrapia subordinada a los
EUA, desnudada por el periódico The Guardian, asesorada por un militar
colombiano, violador de todo derecho humano. Un Peña Nieto perseguido por su
pasado, represor en Atenco y encubridor de los desfalcos cometidos por su tío
Arturo Montiel. Un Peña Nieto exhibido por su ignorancia y por el desprecio que
le causan los jóvenes que piensan, deciden y que lo acosan y repudian.
La verdadera lectura de este
momento político, sin par en la historia nacional, es que en cualquier democracia
moderna, Peña Nieto ya hubiera sido descarrilado de sus pretensiones por conquistar
el poder. En México hay que temer que el mal se imponga, pero hay que orar para
que la divinidad nos haga triunfar.
UN PILÓN: Llego un viejito muy
anciano a mi librería, me pidió el Monitor y agrego es que me gusta mucho una
columna que se llama CARTAS… le dije SUREÑAS y me presente como el escribidor
en persona y lo primero que menciono fue ¡Dios lo bendiga!
Y esta vez, me inspire en el, en
este buen viejo, en ese augurio de fortuna, a quien dedico este ensayo.