Un Aforismo es una definición, aceptada y acordada por gente erudita, producto de la experiencia. A diferencia de Axioma que es una verdad naturalmente obvia y comprobable, un aforismo requiere de la probada repetición de las cosas.
Aunque se atribuye a Hipócrates, el gran médico de la antigüedad la inauguración en el uso de esta clase de sabiduría, es en el discurso empleado en la Política, donde los aforismos adquieren relevancia, para entender asuntos del orden de las comunidades humanas.
Uno de los grandes Políticos en México fue Don Jesús Reyes Heróles, quien era muy dado a utilizar sobre todo los célebres aforismos de Lichtenberg, dos de los cuales son joyas del pensamiento de este sabio nacido en 1742: “El poder corrompe al hombre y el poder absoluto lo corrompe absolutamente”; otro de la misma catadura, dice “Un hombre que no gobierna a su esposa, no tiene nada que hacer en la política”; y dos mas que eran moneda corriente para Don Jesús son el de “La cortesía es la forma de la fuerza” y “en política la forma es fondo”.
Y antes de convidar al lector una gama de aforismos, decían que dijo el filosofo vienes Wittgenstein, “Con mi escrito no pretendo ahorrarle a otro la tarea de pensar, sino en la medida de lo posible, estimularlo a tener pensamientos propios”
Yo aún soy ateo, gracias a Dios. (Luis Buñuel)
La cosa más incomprensible del universo es que al final resulta comprensible.
Este principio es tan general que no es posible aplicarlo a ningún caso particular.
Reflexiona antes de pensar.
Cuanto más tiempo dura una disputa, más lejos nos hallaremos del final.
Si nos encuentran estaremos perdidos.
Los fuegos artificiales eran muy naturales.
El sexo fuerte es generalmente el sexo débil debido a la debilidad que siente el sexo fuerte por el sexo débil.
La inmensa mayoría de los hombres honrados son la inmensa minoría.
Parece imposible, pero la política es el arte de lo posible.
La "vida fácil" suele ser la vida más difícil.
No hay nadie que pueda probarme que la muerte es mala.
Nunca discutas con alguien a quien puedas convencer. Jamás te lo perdonará.
Si las guerras sirvieran para algo, debería de haber más guerras.
Cuando se te queda la mente en blanco lo ves todo negro.
Por regla general, las chicas malas suelen ser las que están más buenas.
Yo no trabajo, porque si trabajara no tendría tiempo para ganar dinero.
La razón se suele dar a los tontos, a los niños y a los locos. Que son los que la tienen.
A todos nos sobra valor para reconocer que somos unos cobardes.
Lo malo de la fama es: no ser famoso.
El dinero sólo sirve para todo. Pero nada más.
Sabemos que sólo vivimos una vez. Pero lo ignoramos.
Si se pudiera probar la existencia de Dios, aumentaría el número de suicidios.
Si encomiendas a un hombre más de lo que puede hacer, lo hará. Si solamente le encomiendas lo que puede hacer, no hará nada.
Mucho mejor que arrepentirse es no tener que arrepentirse.
Por muy bajo que hable siempre me oigo.
Todo el mundo parece bueno, excepto la mayoría.
El que busca venganza que cave dos tumbas.
Lo importante es saber perder. Dicen los que no saben ganar.
Los hombres son viejos cuando el trabajo deja de ser una diversión y la diversión empieza a ser un trabajo.
Bebe para olvidarte de que eres alcohólico.
La muchacha inteligente frente a dos males elige el más rico.
Comúnmente es la Geografía de una muchacha la que determina su Historia.
Eso de que nada en el mundo es verdad, es mentira.
Yo solía ser un indeciso, pero ya no estoy seguro.
Me gusta ir a las librerías porque me gusta estar solo.
Cuando hagamos todo lo que dice la iglesia, ¡Dios nos coja confesados!
Si no me agrada ser huérfano es por no darle un disgusto a mis padres.
No hay cosa más triste que gritar en voz baja.
Mis opiniones han cambiado, pero no el hecho de que estoy en lo correcto.
El que dice todo lo que piensa, piensa muy poco lo que dice.
El sabio no dice todo lo que piensa y piensa todo lo que dice.
El hombre es libre cuando empieza a decir que no.
Yo no creo en Dios pero si en Al Pacino (Javier Bardem)
Aunque se atribuye a Hipócrates, el gran médico de la antigüedad la inauguración en el uso de esta clase de sabiduría, es en el discurso empleado en la Política, donde los aforismos adquieren relevancia, para entender asuntos del orden de las comunidades humanas.
Uno de los grandes Políticos en México fue Don Jesús Reyes Heróles, quien era muy dado a utilizar sobre todo los célebres aforismos de Lichtenberg, dos de los cuales son joyas del pensamiento de este sabio nacido en 1742: “El poder corrompe al hombre y el poder absoluto lo corrompe absolutamente”; otro de la misma catadura, dice “Un hombre que no gobierna a su esposa, no tiene nada que hacer en la política”; y dos mas que eran moneda corriente para Don Jesús son el de “La cortesía es la forma de la fuerza” y “en política la forma es fondo”.
Y antes de convidar al lector una gama de aforismos, decían que dijo el filosofo vienes Wittgenstein, “Con mi escrito no pretendo ahorrarle a otro la tarea de pensar, sino en la medida de lo posible, estimularlo a tener pensamientos propios”
Yo aún soy ateo, gracias a Dios. (Luis Buñuel)
La cosa más incomprensible del universo es que al final resulta comprensible.
Este principio es tan general que no es posible aplicarlo a ningún caso particular.
Reflexiona antes de pensar.
Cuanto más tiempo dura una disputa, más lejos nos hallaremos del final.
Si nos encuentran estaremos perdidos.
Los fuegos artificiales eran muy naturales.
El sexo fuerte es generalmente el sexo débil debido a la debilidad que siente el sexo fuerte por el sexo débil.
La inmensa mayoría de los hombres honrados son la inmensa minoría.
Parece imposible, pero la política es el arte de lo posible.
La "vida fácil" suele ser la vida más difícil.
No hay nadie que pueda probarme que la muerte es mala.
Nunca discutas con alguien a quien puedas convencer. Jamás te lo perdonará.
Si las guerras sirvieran para algo, debería de haber más guerras.
Cuando se te queda la mente en blanco lo ves todo negro.
Por regla general, las chicas malas suelen ser las que están más buenas.
Yo no trabajo, porque si trabajara no tendría tiempo para ganar dinero.
La razón se suele dar a los tontos, a los niños y a los locos. Que son los que la tienen.
A todos nos sobra valor para reconocer que somos unos cobardes.
Lo malo de la fama es: no ser famoso.
El dinero sólo sirve para todo. Pero nada más.
Sabemos que sólo vivimos una vez. Pero lo ignoramos.
Si se pudiera probar la existencia de Dios, aumentaría el número de suicidios.
Si encomiendas a un hombre más de lo que puede hacer, lo hará. Si solamente le encomiendas lo que puede hacer, no hará nada.
Mucho mejor que arrepentirse es no tener que arrepentirse.
Por muy bajo que hable siempre me oigo.
Todo el mundo parece bueno, excepto la mayoría.
El que busca venganza que cave dos tumbas.
Lo importante es saber perder. Dicen los que no saben ganar.
Los hombres son viejos cuando el trabajo deja de ser una diversión y la diversión empieza a ser un trabajo.
Bebe para olvidarte de que eres alcohólico.
La muchacha inteligente frente a dos males elige el más rico.
Comúnmente es la Geografía de una muchacha la que determina su Historia.
Eso de que nada en el mundo es verdad, es mentira.
Yo solía ser un indeciso, pero ya no estoy seguro.
Me gusta ir a las librerías porque me gusta estar solo.
Cuando hagamos todo lo que dice la iglesia, ¡Dios nos coja confesados!
Si no me agrada ser huérfano es por no darle un disgusto a mis padres.
No hay cosa más triste que gritar en voz baja.
Mis opiniones han cambiado, pero no el hecho de que estoy en lo correcto.
El que dice todo lo que piensa, piensa muy poco lo que dice.
El sabio no dice todo lo que piensa y piensa todo lo que dice.
El hombre es libre cuando empieza a decir que no.
Yo no creo en Dios pero si en Al Pacino (Javier Bardem)
No comments:
Post a Comment