Quienes opinen que la selección de Eruviel Ávila, como candidato del RIP a la Gubernatura del Estado de México, fue producto del miedo que les causaba a la plutocracia toluqueña, la división y deserción hacia la malhadada alianza PRD-PAN, están leyendo mal. Creo que el único de los supuestos candidotes, que se prestaron para el viejo juego de la prestidigitación, que culminó con la aparición destapada de un candidato de supuesta unidad, merced al “dedazo” del Gobernador, era precisa y únicamente Eruviel Ávila.
En términos beisbolisticos se podría decir que Peña Nieto “jugo con el librito” El “Gran Elector” Mexiquense, el Monarca Toluqueño, tomo la determinación de nombrar al Presidente Municipal de Ecatepec, como su candidato para sucederlo, con base en las más esenciales recomendaciones maquiavélicas para conservar el poder y esperar que un triunfo en el Estado de México, por lo pronto le dé garantías para apoderarse de la candidatura por el RIP, para las elecciones de Presidente de México, el próximo 2012, año de profecías apocalípticas.
Otros propalan la versión de que Carlos Salinas de Gortari fue determinante en la selección final de Ávila Villegas. Hay que aceptar que la selección por la que apostaba el oráculo de la Web@, en la persona de Francisco Rojas, el Coordinador de los Diputados del PRI en San Lázaro, el cuñado del aún Embajador Pascual, y el miembro del “círculo compacto” del entonces Presidente, no fue atinada. Sin embargo, la prontitud con que Elba Esther Gordillo aposto por una alianza con Peña Nieto y el RIP Estatal, empeñando a sus huestes magisteriales obedientes, esparce un tufo muy conocido por quienes hemos seguido los pasos del villano que entrego México a la clase reaccionaria autóctona, a la iglesia católica y a los Estados Unidos.
Hay que reconocer que las decisiones políticas que se han adoptado en las últimas semanas, teniendo como tablero el proceso de sucesión electoral en el Estado de México, son auténticas jugadas de ajedrez. El primer movimiento, con base en su audacia, tenacidad y el trabajo inagotable, contra los medios que no cejan de atacarle con saña y sorna, la dio Andrés Manuel López Obrador, al manifestarse contrario de manera tajante, a una alianza pretendida con el PAN. Ese jaque al descubierto derrumbo la endeble defensa del PAN, quien se quedo sin piezas para seguir jugando. Pero también fueron barridos del tablero los dirigentes “Chuchos” del PRD y todos aquellos quienes dependen de los dineros, prebendas y canonjías que por años llevan recibiendo en el Estado de México, por no hacer nada a favor de los mexiquenses pobres, por ceder las posiciones logradas en el 2006 gracias al efecto López Obrador y por ser comparsas del Gobernador Peña Nieto. Un jaque mate a los partidos políticos, que todavía quisieron salvarse de la derrota inminente, con la dichosa consulta que no servirá sino para buscar presionar de alguna manera, al candidato de todas las izquierdas y de las mayorías mexiquenses, en la persona de Alejandro Encinas.
Sin embargo el “destape” de Eruviel es una contestación táctica, inserta en la estrategia de Peña Nieto para el año entrante: por un lado demuestra capacidad de contención de las dinastías que lo miran como igual si no es que inferior (los Del Mazo, la comunidad libanesa, Hank etc.) y por otro lado deja entrever que aquella proclama de Napoleón Bonaparte de que en “cada mochila de soldado estaba contenido un bastón de Mariscal” o nuevamente en el campo del ajedrez de que un peón puede convertirse en la pieza más poderosa del tablero, de llegar a la octava fila, surtirá seguramente un efecto positivo, entre la estructura del PRI y favorecerá las aspiraciones del ahora ya formal candidato Ávila Villegas.
Es importante en estos momentos, analizar el modelo político al que obedece la designación del candidato a gobernador. Una historia que arranca en 1824, en realidad toma forma y contenido a partir del año de 1914, cuando un joven médico, Gustavo Baz Prada, militante del ejercito zapatista asume el Gobierno del Estado de México y lleva a cabo en solo dos años que dura en el mandato la mayor repartición de tierras latifundistas, entregadas a campesinos y ejidatarios. El joven Baz dio inicio el reparto de La hacienda de la Gavia, el emblemático ejemplo de la injusticia (136 mil hectáreas) que llegaba de Toluca a Acapulco.
Don Agustín Millán, Filiberto Gómez o Carlos Riva Palacio, son otros constructores de un estado que culmina con la elección del paisano de Temascaltepec, Alfredo Zárate Albarrán, leal revolucionario, mujeriego y borracho, pero valiente Gobernador, que enfrenta las medidas contrarrevolucionarias de Manuel Ávila Camacho, por lo que es muerto en un confuso y hasta la fechas no aclarado (como Colosio o Mouriño) asesinato, que abre las puertas para que en el Estado de México se imponga a un decano de la Diplomacia, el Maestro Isidro Fabela, no por ello un hombre digamos, extraño, por decir lo menos, en sus gustos y preferencias. Esta designación es clave en el Estado de México, porque Isidro Fabela se encargará de conformar un poder en la Capital del Estado, que desde 1942 ha impuesto a nueve Gobernadores, relacionados no solo políticamente sino por lazos de sangre y familia: Monroy, Colín, Hank, Montiel, Peña, Vélez, Maza, Vilchis, Del Mazo.
Con excepción del periodo que Gobierna Constitucionalmente el Dr. Baz Prada, de 1957 a 1963, que represento un autentico oasis social para el estado; de Ciudad Universitaria, honestidad, carreteras, educación y ante todo ejemplo republicano, la designación de Fernández Albarrán (¿alguien sabe quién es?) deshizo el proyecto político revolucionario en el Estad de México y preparo el advenimiento del “güero” consentido de Don Isidro, el “alemán” Hank González. El Dr. Baz esta borrado de la memoria histórica y del panteón político del Estado de México, en tanto Carlos Hank González tiene una estatua que define a la entrada de Toluca, el perfil, modo, costumbres y naturaleza de esta entidad.
La selección de Eruviel Ávila, acaso el político con el curriculum más nimio, perfil y experiencia que no va más allá de la grilla pueblerina municipal, en todo caso constituye una irrupción que contiene la sucesión dinástica, que esta vez decidió por la alternancia para este periodo 2011-2017, con la esperanza puesta en que el RIP pueda vencer a una enorme mayoría de mexiquenses, que estén dispuestos a encontrar el próximo 3 de julio, el ansiado DIA DE LA LIBERTAD, con su voto, a favor de Andrés Manuel López Obrador-Alejandro Encinas.
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